Mátame

Si me vas a matar mátame ahora sin miramientos 

No intentes negociar que finalmente aún si aceptara tus condiciones preferiría estar muerto que cumplirlas

Mátame ahora, mátame aquí, rápido que ya no hay tiempo

Sólo será un golpe y después de ello, silencio

La muerte no es sino un sendero tras el cual reinicio, y por eso no temo.

Mátame ya pues, aprieta el gatillo, siento ansiedad por hacerme uno con el universo...

... Y sin ti.

(02/14/2013)

Cabos.

Verán, la cosa es sencilla, es cosa de tomar un hilito, no importa el grosor o relevancia, y unirlo con otro en una perfecta trenza.

De poquito a poquito, de cabo a cabo cuando te das cuenta ya tienes algo, bonito o feo, pero ya es algo que tu hiciste.

Diferente es cuando, de la nada, tomas un cabito y lo comienzas a seguir, a desamarrar tantito, a continuar el camino de los otros segmentos que lo acompañaban, ahí puedes encontrar sorpresas de muchos tipos.

Un último caso es tomar los hilitos y jalar y jalar y terminar destruyendo el constructo, sin darte cuenta de lo intrincado del tejido o del tiempo y esfuerzo que tomo esa fabricación, sólo por el gusto de deshacer las cosas.

Pues igualito con la vida, mis amigos.

3.14

No hay sueño, aunque hay cansancio

Esa desesperanza que da el saber que los sueños son sólo eso

La mente para, se fija en un segmento del camino, y no deja que siga avanzando el tren de ideas, cuyo destino era soñar

Bienvenidos a la parada inesperada que, sin embargo, se veía venir desde mucho antes

Cierra los ojos, envuélvete en la sombra de tus pensamientos...

Y quédate ahí.

No tienes muchas opciones, de hecho.